Vivimos en una sociedad cada vez más consciente del medio ambiente. Por ello el uso de productos naturales se ha incrementado en los últimos años en diversos aspectos como la alimentación, la moda o la cosmética. En el artículo de hoy, hablaremos sobre la cosmética orgánica, un concepto que a pesar de no ser nuevo, ha ganado peso en los últimos años. Veremos cuáles son sus principios activos y cómo puede beneficiar a nuestra piel. Continúa leyendo para saber más y recuerda que puedes especializarte en el sector con nuestro Máster en Cosmética y Dermofarmacia.
Índice de contenidos
¿Qué es la cosmética orgánica?
Existen muchas definiciones que nos pueden confundir a la hora de elegir un tipo u otro de cosmético. En este punto podemos aclarar que tanto el término orgánico, bio y eco son sinónimos en este sentido, ya que su clasificación según la certificación específica de estos productos es la misma.
La característica principal de la cosmética orgánica es que utiliza ingredientes naturales que han sido producidos siguiendo los criterios de la agricultura ecológica que establece el Reglamento Europeo u otras normas equivalentes de otros países. Para poder llevarlo a cabo, el uso de fertilizantes, pesticidas o herbicidas químicos están prohibidos. Los ingredientes ecológicos están certificados para poder reconocerlos como tales. Pero ¿todos los cosméticos que están etiquetados como ecológicos, orgánicos o bio siguen estas normas? La respuesta es sí.
A pesar de no existir ninguna ley universal sobre este asunto, sí que existen normativas internacionales que deben seguirse para producir los ingredientes de la cosmética orgánica. Dichas normativas también regulan que esta cosmética respete y cumpla unos porcentajes ecológicos y naturales específicos, naturales, el uso de unos ingredientes u otros, los procesos de transformación, el tipo de agua utilizada, también cómo se han testado e incluso cuánto consumo energético han causado.
Sus principales beneficios
– No contienen aromas artificiales o sintéticos ni conservantes
– Se adaptan bien a cualquier tipo de piel, ya que sus ingredientes son más afines a la epidermis
– Tampoco contienen elementos químicos
– Ayudan a regenerar, cuidar y proteger la piel de forma natural y con eficacia
– Tienen un efecto menos agresivo que la cosmética convencional
– Es beneficiosa para el medio ambiente
– No producen alergias o efectos secundarios
– Pueden utilizarla adultos, personas mayores y niños sin importar el sexo
¿Cómo saber qué tipo de cosmético estás comprando?
Tal y como comentábamos en el primer punto de este artículo, los fabricantes de cosméticos incluidos los de cosmética natural y ecológica, deben regirse mediante el Reglamento (CE) no 1223/2009 del Parlamento Europeo y del Consejo de 30 de noviembre de 2009 sobre los productos cosméticos. Dicho Reglamento rige aquellos puntos que deben tener en cuenta las empresas a la hora de producir cualquier tipo de producto cosmético. Sin embargo, no hace referencia ni indica datos precisos o de relevancia para aquellas empresas que se dediquen a la fabricación de cosmética natural u orgánica.
El único Reglamento sobre cosmética ecológica que se conoce hasta el momento, es la Decisión de la Comisión, de 9 de Diciembre de 2014 a partir del Reglamento (CE) 66/2010 del Parlamento Europeo y del Consejo de 25 de noviembre de 2009. En dicho reglamento se establecen diversos criterios ecológicos para la concesión de la etiqueta ecológica en los productos cosméticos que precisan de aclarado tras su utilización como pueden ser jabones, champús o acondicionadores de cabello.
Sin embargo sigue sin haber especificaciones para el resto de productos. Por ello, se crearon diversos certificados con el objetivo de facilitar a los productores de este tipo de cosmética y una distinción considerable. También para que pudieran proporcionar información fiable a su público objetivo y a sus consumidores para que puedan apostar por la calidad para la piel.
Certificaciones en la cosmética eco
A la hora de comprar un producto natural para nuestra piel, lo más sencillo es buscar aquellos que cuenten con una certificación para asegurarnos de que se han seguido los criterios nombrados anteriormente. Los certificados más utilizados en la cosmética orgánica y natural comercializada en España son:
- BIOVIDASANA
- COSMOS
- ECO-CERT
- NATRUE
- BDIH
- BIO y ECO
- SOIL ASSOCIATION
